Mi reciente experiencia como madre me ha servido para mejorar como profesional. Como fisioterapeuta especialista en suelo pélvico, tengo los conocimientos y experiencia que requiere un experto en la materia, pero ahora también puedo hablar desde la vivencia de haber parido y conocer las sensaciones, emociones… y todo lo que conlleva dar a luz para la mujer.
Sabemos que fortalecer los músculos del suelo pélvico durante la gestación previene la incontinencia urinaria y los prolapsos genitales, es decir, una buena preparación del suelo pélvico para el parto te da más posibilidades de tener una óptima recuperación posparto, aunque no es el único factor, pues también influyen desde aspectos como la alimentación, el estrés, las posibles complicaciones del embarazo, o la intervención del ginecólogo en el expulsivo. Pero, al menos, sí debemos controlar los factores que dependen al 100% de nosotras.
Entre ellos está la preparación al parto y, en mi caso, el trabajo del suelo pélvico. Está comprobado que reforzar el tono alrededor del canal vaginal mejora la fase del expulsivo en un parto natural.
El expulsivo es una de las últimas fases del parto, cuando la mujer tiene contracciones uterinas muy potentes, su cuello uterino está dilatado por completo y, realizando los pujos, se provoca el descenso y la salida del bebé al mundo externo. En esta fase, lo crucial es la correcta técnica del pujo que realiza la madre, una adecuada postura para favorecer la bajada de la cabeza fetal y un suelo pélvico bien tonificado. Os explicamos por qué.
¿Qué papel tiene el suelo pélvico durante el expulsivo?
En esta penúltima fase del parto, cuando la mujer realiza los pujos, la cabeza del bebé baja hasta comprimir totalmente los músculos del suelo pélvico y el cuello uterino. Esta compresión junto con las contracciones uterinas que alcanzan 30 mmHg de amplitud, provocan un reflejo que se llama Reflejo de Ferguson-Harris. Es lo que desencadena la producción de la oxitocina en el cuerpo de la mujer y el deseo de pujar.
¿Qué pasaría si el reflejo no aparece? La mujer no sentiría ningún tipo de estímulo o deseo de realizar los pujos. Es lo que suele pasar con una dosis muy alta de la anestesia epidural.
En estos casos los partos son pasivos y los pujos dirigidos por las matronas. Por lo que si quieres saber cómo preparar el suelo pélvico para el parto, te diré que teniendo un buen tono muscular del suelo pélvico puede mejorar la respuesta hormonal, mayor producción de la oxitocina, ya que cuanto más contacto de la cabeza fetal haya en el piso pélvico y cérvix, más probabilidades tenemos de experimentar dicho reflejo.
¿Cómo ayuda el suelo pélvico en el parto?
Como hemos comentado antes, una correcta masa muscular en la zona del suelo pélvico favorecerá la aparición del reflejo de Ferguson-Harris y por lo tanto, el parto será más dinámico, con pujos más espontáneos. Es algo que puede disminuir el riesgo de usar algún tipo de instrumental ya que la cabeza del bebé descenderá de forma natural.
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Un adecuado tono del suelo pélvico alrededor del canal vaginal puede mejorar también la propia dinámica del descenso del bebé, ayudándole a que rote y a que se amolde adecuadamente en la pelvis. Las mujeres con el canal vaginal muy distendido, con muy poca fuerza muscular en la pelvis, pueden experimentar los partos más largos y con mayor tasas de intervenciones médicas.
¿Cómo tonificar el suelo pélvico para mejorar el expulsivo?
Lo primero es evaluar el estado tanto del suelo pélvico como del abdomen en el inicio del embarazo o incluso antes de este. Debemos descartar las hipertonías, contracturas musculares u otras disfunciones en las que ejercitar y trabajar la fuerza muscular podría ser perjudicial. Tras la primera valoración, seguimos este programa de ejercicios para fortalecer el suelo pélvico antes del parto:
- Ejercicios kegel con sonda vaginal y biofeedback.
- Ejercicios de suelo pélvico priorizando las contracciones lentas, de duración entre 5 y 10 segundos.
- Ejercicios kegel combinados con el movimiento corporal.
- Entrenamiento abdominal y aprendizaje de cómo coordinar la contracción perineal con abdominal.
- Reeducación postural, ejercicios en plataformas inestables.
- Ejercicios de relajación perineal como prevención de los desgarros perineales.
¿Trabajar sólo la fuerza del suelo pélvico o también la elasticidad?
De cara al parto necesitamos que el suelo pélvico tenga un buen tono y, por otro lado, una adecuada elasticidad para que las fibras musculares puedan estirarse en el expulsivo sin riesgo de sufrir las lesiones.
A partir de la semana 33 de embarazo iniciamos el masaje perineal que debemos hacer por lo menos 3 veces por semana, en casa. Realizándolo, nos familiarizamos con la sensación de presión en la vagina, estiramiento de la piel, desplazamiento de la pared posterior del canal vaginal hacia abajo, etc.
Son sensaciones que experimentaremos durante el parto. Además, realizando el masaje perineal con frecuencia, puede disminuir el riesgo de sufrir un desgarro perineal de grado III ó IV.
Lo que mejora también la elasticidad del suelo pélvico son los ejercicios de movilidad pélvica, los estiramientos de la musculatura lumbar, de los grandes flexores de las caderas, ejercicios respiratorios y la meditación.
¿Cuándo debemos empezar con el fortalecimiento del suelo pélvico durante el embarazo?
Los ejercicios para fortalecer el suelo pélvico antes del parto, como los ejercicios Kegel se deben realizar desde el inicio de la gestación y hasta la semana 36. En realidad, no hay ninguna contraindicación médica en hacerlos, salvo una infección de orina activa, una candidiasis activa, sangrado vaginal o una hipertonía muscular.
Te dejo un vídeo que seguro te ayudará a realizar los ejercicios de preparación de suelo pélvico para parto con mayor facilidad.
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